Actualmente la investigación está en la etapa de revisión de datos, que incluye a personas
que sufrieron un Ataque Cerebrovascular isquémico (2018 y 2019) y fueron atendidos en el
Establecimiento. También desarrollaron una plataforma digital personalizada y segura,
además de difundir a la comunidad el proyecto con educación en centros de salud familiar,
con apoyo del Servicio de Salud Ñuble y la Seremi.
Debido a la alta incidencia y letalidad del Ataque Cerebrovascular en Ñuble, médicos del
Hospital Clínico Herminda Martín (HCHM), en conjunto con investigadores de la
Universidad del Bío Bío (UBB) desarrollan un novedoso proyecto de investigación que
pretende identificar los factores clínicos – de forma temprana- para pronosticar secuelas
funcionales y cognitivas de los Ataques Cerebrovasculares isquémicos (ACVi), usando
herramientas de inteligencia artificial.
El Dr. Eduardo López, neurólogo del HCHM acotó al respecto que “nuestra Región tiene
una alta incidencia de Ataques Cerebrovasculares, siendo en promedio unos mil 100 a mil
200 casos al año. Por ello, la meta del estudio es disminuir este índice, generando un
nuevo plan, gestionando la enfermedad para que en una persona no se repita la patología
o incluso conseguir realizar un seguimiento a quienes serán identificados como con alto
riesgo de sufrir un infarto cerebral y controlarlos, sin esperar que lleguen a la urgencia y
de esa forma reducir la incidencia. Para ello, es muy importante la educación a la
comunidad, pues en estos momentos lo que sucede es que cuando están cursando la
enfermedad se quedan en casa pues creen que se les va a pasar y eso genera un mayor
índice de secuelas, pues consultan de forma tardía”.
El propósito de la investigación es desarrollar “un modelo de riesgo de secuelas
funcionales como caminar o neurocognitivas, que se evidencian en la dificultad de
lenguaje, de memoria y orientación, esto se logra mediante la asociación de factores
clínicos, como peso, talla, antecedentes patológicos tanto cardiológicos como
cerebrovasculares en la familia, entre otros; y antropométricos como edad, género, lugar
de residencia, estado civil”, aseguró el Dr. López.
Por su parte, el Dr. Andrés Rodríguez, magíster en Ciencias biológicas de la UBB, aseguró
que “actualmente estamos revisando los datos de compilación (2018 a 2019) de personas
que sufrieron un ACV isquémicos y fueron tratados en el Hospital local. También
realizamos los primeros preanálisis de estadísticas descriptivas y de inteligencia artificial.
Asimismo de forma paralela, se trabajó en una plataforma de clasificación de infarto
cerebral, alimentándola con imágenes de escalas de Oxford, que los cataloga en anterior,
posterior y profundo. Este dispositivo es digital y segura, con el propósito de resguardar la
confidencialidad de la información y el desarrollo de algoritmos de inteligencia artificial”.
La investigación incluye el análisis de los datos antes mencionados mediante Machine
Learning, que permite analizar un gran número de datos asociadas con un fenómeno,
dejando en el pasado analizar una a una cada variable, sino de forma simultánea. “En
particular este proyecto incluye un análisis clínico en cuatro ventanas: la primera el
diagnóstico de ACVi, la segunda la evolución al alta del paciente, la tercera, la evolución a
30 días y finalmente, la cuarta que es a tres meses. Este análisis se realizará tanto en la
fase retrospectiva -que considera un total de 1200 personas con quienes se generará un
modelo de riesgo de secuelas- y también en la prospectiva para probar el modelo en una
escala más pequeña que incluirá a 300 personas”, puntualizó Rodríguez.
EDUCACIÓN COMUNITARIA
Además, el investigador sostuvo que “en conjunto con la Escuela de Enfermería de la
Universidad de Bío Bio y en coordinación con el Servicio de Salud Ñuble y la Seremi,
estamos educando a la comunidad perteneciente a 12 Centros de Salud de la región, de
comunas rurales como Bulnes, Portezuelo, el Carmen, entre otras, para que las personas
sepan qué es un ACV, cómo detectarlo y qué hacer en caso de presentarlo, con el
propósito de subir el nivel de educación sobre la patología”.
Se espera, que el piloto de la investigación o fase predictiva comience en 2024, mientras
que hoy fue difundida en la Jornada de Neurociencias que planificó el Comité Ético
Científico del Establecimiento, ocasión en la que además se expuso otra temática
denominada “Neurogénesis en cerebro adulta: ¿fin del dogma?”, por el Dr. Roberto Vera
de la Universidad de Santiago de Chile, autor del libro "Nuevas neuronas en nuestro
cerebro?”.