Nueva normativa regula publicidad y venta de cigarrillos electrónicos a menores de edad. Desde este martes 19 de mayo entra en vigencia la Ley 21.642, normativa que regula la venta, promoción y uso de cigarrillos electrónicos —con o sin nicotina— así como los líquidos utilizados para su vaporización. Cristian Ortega, profesional de la Unidad de Promoción y Participación Ciudadana de la Seremi de Salud Ñuble, explicó que esta nueva legislación prohíbe la venta de estos dispositivos y sus accesorios a menores de 18 años. Además, obliga a incorporar advertencias claras sobre los riesgos y daños asociados a su uso. “Dado que estos sistemas electrónicos de administración de nicotina son potencialmente adictivos, la nueva ley establece que la publicidad sólo estará permitida en radio entre las 20:00 y las 06:00 horas, con una advertencia auditiva obligatoria de al menos ocho segundos, provista por el Ministerio de Salud. En medios impresos, el 50% del espacio deberá ser destinado a advertencias sanitarias. Además, se prohíbe cualquier promoción de estos productos en un radio de 100 metros de colegios y centros de salud, entre otras restricciones”, detalló Ortega. La fiscalización del cumplimiento de la ley estará a cargo de la Seremi de
Salud, institución que tendrá la facultad de aplicar multas, iniciar sumarios sanitarios, decomisar productos e incluso clausurar locales comerciales. Aunque a menudo se promocionan como una alternativa «menos dañina» que el tabaco convencional, los cigarrillos electrónicos también liberan sustancias
tóxicas y cancerígenas, que aumentan el riesgo de enfermedades cardíacas y pulmonares. Su uso en jóvenes puede afectar el desarrollo del cerebro y provocar
trastornos del aprendizaje. Asimismo, diversos estudios han demostrado que no son efectivos para dejar de fumar.
¿Qué es un cigarrillo electrónico?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) los clasifica como Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN) o, cuando no contienen
nicotina, como Sistemas Electrónicos de Dispensación sin Nicotina (SESN). Según el Instituto de Salud Pública, estos dispositivos cuentan con un depósito o
cartucho que contiene un líquido compuesto por propilenglicol, glicerina, saborizantes y otros compuestos químicos. Mediante una batería y un atomizador,
el aparato calienta este líquido hasta transformarlo en vapor, que luego es inhalado por el usuario, llegando a los pulmones y finalmente exhalado al ambiente.
Florencia González Arenas |