Bajo el lema “transformar para impactar” estudiantes y docentes implementaron el primer
proyecto de innovación de la institución educativa
(Prensa IST, 29/10/2) La institución educativa Santo Tomás, inauguró en la
Escuela Básica Quilamapu de Chillán, un rincón neurocompatible, un proyecto
pionero de innovación social que promueve un enfoque inclusivo en la enseñanza.
Este espacio está diseñado para apoyar el aprendizaje y la autorregulación
emocional de niños en edad parvularia, especialmente aquellos con
neurodivergencias, facilitando un ambiente adaptado a sus necesidades
sensoriales.
El proyecto, liderado por Karen Figueroa, docente de la carrera de
Psicopedagogía en la sede Chillán de Santo Tomás, fue posible gracias a un
Fondo de Innovación Social de la institución, consolidado bajo el lema
«Transformar para Impactar», la iniciativa reafirma el compromiso de la IES con
una educación inclusiva y accesible, beneficiando a la comunidad educativa de
esta escuela ubicada al nororiente de la ciudad.
Detalló Figueroa que: “En el área neurocompatible, los estudiantes cuentan ahora
con herramientas sensoriales como sillas y mantas de peso, fidgets táctiles y
audífonos con cancelación de ruido. Además, se ha acondicionado un ´espacio de
calma´ donde los estudiantes pueden autorregularse en momentos de
desregulación emocional, favoreciendo su concentración y bienestar en el aula”,
explicó la educadora.
Verónica Neira, jefa de la unidad técnica pedagógica de la Escuela Básica
Quilamapu, expresó su gratitud a la institución: “Quiero agradecer a Santo Tomás
por este aporte tan necesario. Estos recursos no siempre están disponibles en las
escuelas pequeñas y su implementación será de gran ayuda para nuestros
estudiantes, quienes llegan con diversas necesidades educativas”.
Por su parte, Javiera Carrasco, estudiante de Psicopedagogía de segundo año,
señaló su entusiasmo por ser parte de esta transformación en la enseñanza: “Me
siento muy emocionada por participar en esta innovación que permitirá que los
niños aprendan de forma más fluida, respetando sus necesidades emocionales y
sensoriales”.
En cuanto al impacto de este espacio, Mariela Fernández, coordinadora de VCM,
aseguró: “Este proyecto fortalece la política de Vinculación con el Medio de Santo
Tomás, generando un espacio bidireccional de aprendizaje entre la universidad y
la comunidad educativa. Esta primera sala neurocompatible en Chillán representa
un paso significativo hacia una educación inclusiva que celebra la diversidad y
responde a las necesidades de cada estudiante.
Tatiana Aular Aguirre |